Colossians 3:21 Padres, no exasperen a sus hijos, no sea que se desanimen.
Encontraría difícil creer que soy el único en darse cuenta de la tendencia a la ira y al desánimo que hay hoy día en todo el mundo. En Norte América, podemos estar de acuerdo que muchos ciudadanos tienen acceso a múltiples comodidades y electrodomésticos que hacen la mayor parte del trabajo necesario para mantener un estilo de vida cómodo. Estas mismas personas también tienen un suministro constante y listo de alimentos para comer a voluntad. Entonces la pregunta que viene es, ¿Porqué éstas personas tienen el alma más desanimadas, solitarias, egoístas llenas de ira en este planeta? ¿Qué ha estado comprado la nación con tanto que los distrae a expresar gratitud por lo que tienen?
¿Como fue que hemos caído tan fácil en este constante estado de ira y desánimo? Salmos 69:3 Cansado estoy de pedir ayuda; tengo reseca la garganta. Mis ojos languidecen, esperando la ayuda de mi Dios. Puede ser que el problema sea – ¿Qué ha pasado con el dios a quien le lloras y esperas de su ayuda? ¿Has puesto la seguridad de tu futuro en las manos del partido político, gerentes de compañías o farmacéuticas médicas conglomerados? Algunas de estas organizaciones anónimas son las que están causando muchos de los problemas en el mundo y no tienen la sabiduría de cómo solucionar este desastre, y el resultado es personas que se mantienen en un estado constante de ira porque confiaban completamente en ellos. En el momento en que pongamos toda nuestra confianza en la capacidad del hombre, vamos a sufrir una gran pérdida. Jer. 17:5 Así dice el Señor: «¡Maldito aquel que confía en los hombres, que se apoya en fuerzas humanas y aparta su corazón del Señor!
¿Alguna vez has escuchado a un político servir una ensalada de palabras del mismo viejo meritorio monólogo que no tiene idea de lo que están hablando? De alguna manera, caíste en esa ira que estaban vendiendo y ahora tienes un alma llena de pensamientos de odio hacia cierto grupo de personas que no te habías dado cuenta hasta que te dieron permiso de odiarlos. Toda esta confusión entre los corazones de las personas le han destruido su paz. Lo vemos una y otra vez cuando los candidatos políticos usan palabras cristianas sobre rectitud para obtener votos y puedan entrar a poder y después llevar a todos a un infierno. Los pobres votantes están retrocediendo en plena ira agitada pensando cómo fue que pasaron a estas circunstancias bajo sus narices.
La palabra dice que padres no provoquen a sus hijos a ira, a no sea que los hijos lleguen a desanimarse. Col. 3:21 Padres, no exasperen a sus hijos, no sea que se desanimen. Unos de nuestros padres cívicos y líderes han provocado ira entre el corazón de la gente a punto de perder el sueño. Efe. 4:26 «Si se enojan, no pequen». No permitan que el enojo les dure hasta la puesta del sol. Ya sea que por accidente o a propósito, algunos de nuestros líderes de nuestra tierra y país han llevado a sus ciudadanos a un desánimo palpable. La sensación de no tener esperanza hace que una gran parte de la población se mantenga enojada todo el tiempo con algo o con alguien.
¿Cómo podemos escapar del efecto de esta trágica y manipulativa corrupción siento instigada? Lo primero que todos necesitan hacer, es dejar de estar vendiendo ira como un producto o como una solución para resolver problemas y que se hagan las cosas. Este consejo es tóxico. Es por eso que Dios no pide que oremos por nuestros líderes. 1Tim. 2:1 Así que recomiendo, ante todo, que se hagan plegarias, oraciones, súplicas y acciones de gracias por todos, 2 por los reyes y por todas las autoridades, para que tengamos paz y tranquilidad, y llevemos una vida devota y digna. Se han dado cuenta que Dios no nos pide que oremos por ellos solo, que tú hayas votado por ellos. Él nos pide que oremos por nuestros líderes porque ellos están liderando con una arrogancia monumental en todos los lados del pasillo político. Ellos necesitan la ayuda de Dios ya sea que lo admitan o no. El premio por nuestra fidelidad en obediencia cuando oramos por ellos, y unos por otros es que viviremos una vida con paz, pues es un buen comienzo a deshacernos de la ira que se ha acumulado en nuestras almas.
Cuando yo llego a Dios con estas preocupaciones, El Señor me señala que debería ser agradecido y que ofrezca palabras de agradecimiento como una cura que contrarresta todas las cosas que me enojan. 1Tesa. 5:18 Den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús. Toda clase de circunstancias puede causar rabia para fulminar entre mi todo el largo día si lo dejo. Seamos realistas, la gente es un tipo especial de estúpidos y no hay un fin de cosas a lo que podemos enojarnos. La solución que Dios me ofrece para que salga de las garras de la ira, es tomar un momento y empezar a ofrecer agradecimiento por las cosas que debería estar agradecido, es entonces cuando la ira empieza a desactivar y finalmente todo el aire caliente que estaba en ira y desánimo finalmente terminará desinflado. Esto también le da una oportunidad al amor que regrese a mi corazón. Entre más me enfoco en agradecimiento son menos las cosas en que tengo tiempo a que me enojen.
Yo se que esto no es muy simple para aquellos quienes pelean por el derecho de su ira. Puede verse como muy ridículo, pero, ¿Cómo podemos componer cada terrible situación en la tierra? Solo podemos lidiar con nuestros propios problemas y nuestra propia capacidad de vivir en paz y ¿No es eso lo que todos buscamos, un estado general de tranquilidad? Tenemos que salirnos del vagón de los que venden ira como una solución a los problemas del mundo. Si la ira fuera una solución, entonces Jesús hubiera dicho, “Mi ira les doy.” No hermanos. Jesús dijo, “¡Mi paz les doy!” Juan 14:27 La paz les dejo; mi paz les doy. Yo no se la doy a ustedes como la da el mundo. No se angustien ni se acobarden. Que la ira y el desaliento se caiga mientras levantamos el nombre de nuestro Dios en gratitud. Bendiciones sobre todos nosotros.
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