Prov. 16:21 Al sabio de corazón se le llama inteligente; los labios convincentes promueven el saber.
¿Cuándo la madurez espiritual llega a ser realidad en tu vida diaria? ¿Cuando cosas espirituales paran de ser solo para el domingo? Normalmente pasa cuando tomamos nuestro crecimiento espiritual en serio y finalmente nos tiramos a navegar con dirección hacia lo que Jesus nos manda. Espiritualidad inmadura nos mantiene en peligro yéndonos donde el viento nos mande sin ningún rumbo o brújula confiable para seguir. Cuando estamos en un permanente estado espiritual de niño, es muy fácil de creer en todo lo que venga, no importa que tan ridículo sea. Efesios 4:14 Así ya no seremos niños, zarandeados por las olas y llevados de aquí para allá por todo viento de enseñanza y por la astucia y los artificios de quienes emplean artimañas engañosas. Cuando ponemos nuestro velero a navegar hacia lo que dice Dios, empezamos a madurar. La razón por la cual empezamos a crecer en serio es porque ya no nos engañamos hablados cosas de religión, sino empezamos a vivir nuestra convicción del Espíritu Santo que ha tomado lugar en nuestro corazón. Santiago 1:22 No se contenten solo con escuchar la palabra, pues así se engañan ustedes mismos. Llévenla a la práctica.
Andy Stanley dice, “Solo tener conocimiento de la Biblia nos pone arrogante pero la palabra de Dios practicada nos santifica.” No hay nada más para sentirnos libre que en perdirle a Dios, por medio de oración, que la respuesta de un problema en particular Dios nos guía con su palabra y nos da solución. Cuando nuestra alma lo sabe y ve la solución de lo que oramos hay gozo en emprender nuestro velero y navegar a lo que se nos ha dirigido en el corazón. Se siente que estamos avanzando cortando entre las olas de problemas. Nuestro velero está listo para navegar creciendo por medio de un viento bendito de esperanza moviéndonos hacia la voluntad de Dios. Cuando llegamos a ser completamente persuadido que Jesus es el camino, la verdad y la vida, entonces el gozo del Señor será nuestra fortaleza. Salmos 28:7 El Señor es mi fuerza y mi escudo; mi corazón en él confía; de él recibo ayuda. Mi corazón salta de alegría, y con cánticos le daré gracias.
El apóstol Pablo dice, el dejar las cosas infantiles y crecer como hombre o mujer de Dios a lo que hemos sido llamados. 1 Cor. 13:11 Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, razonaba como niño; cuando llegué a ser adulto, dejé atrás las cosas de niño. El único lugar donde Pablo nos pide que seamos como niños es con las cosas de maldad. Alejémonos de ello rechazándolo profundamente. 1 Cor. 14:20 Hermanos, no sean niños en su modo de pensar. Sean niños en cuanto a la malicia, pero adultos en su modo de pensar. Pablo estaba lidiando con actitudes infantiles en la iglesia de los Corintios. Teniendo que señalar que se estaban emborrachando, siendo inmorales, teniendo orgullo arrogante y ser fanfarrón de ello, no era el fruto de una madurez cristiana. Al contrario, era prueba de inmadurez y actuando como niño era predominante en su camino con Cristo. Pablo les tuvo que recordar a los Corintios cristianos que ya no eran paganos sino que ya se habían dado a sí mismo a Dios para Su propósito. 1 Cor. 6:19 ¿Acaso no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo, quien está en ustedes y al que han recibido de parte de Dios? Ustedes no son sus propios dueños.
Tenemos que navegar hacia la realidad en que vivimos. Hay muchas preguntas duras en este mundo hoy en día que se necesitará una visión divina para responder y ayudar a la gente que está buscando respuestas reales y verdaderas entre la neblina de hoy día humanista moderno en que vivimos. No demos una mesa de pensamientos y creencias ciegas para darle a personas a punto de confusión. Llega el momento en que tenemos que crecer y madurar y mantener una relación con Dios así con el proposito conque fuimos creados. Esto no pasará mientras nos mantengamos inmaduros y siempre necesitados de ser rescatados de nuestra propia estupidez. Ten tacto y propósito creciendo en santidad de Dios. Dirige tu velero hacia el cielo y se la bendición que Dios ha destinado para ti.
Find Other Devotions About:
Buena navegación en el nombre de Jesús