Prov. 3:12 Porque el Señor disciplina a los que ama, como corrige un padre a su hijo querido.
Alguien dijo, “Para que una herida sane, deja de tocarla.”
No hay otro mejor ejemplo de la gracia de Dios obrando que cuando leemos las veces que Jesus caminó entre los leprosos. Puede que sea una herida muy dentro en el alma o una visual herida con infección mortal sobre nuestro cuerpo o tal vez una posesión demoníaca en la mente de una persona y Jesus tocó con su gracia curativa. Hechos 10:38 Me refiero a Jesús de Nazaret: cómo lo ungió Dios con el Espíritu Santo y con poder, y cómo anduvo haciendo el bien y sanando a todos los que estaban oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.
¿Cuantas veces esperamos hasta que haya una infección completa en nuestra vida antes de orar humildemente por Su gracia curativa a nuestro Señor? ¿Porque seguimos tocando la herida en la que estamos sufriendo en lugar de aplicar el bálsamo curativo de la Gracia de Dios en nuestra cituación? La respuesta conque resulto cuando me pregunto ésto viene siendo que orgullo y miedo es lo que nos interpone, porque no siempre creemos que el amor de Dios es para nosotros.
El amor de Dios nunca debería ser dudoso, pero por alguna razón dudamos en el amor de Dios en nuestra mente y corazón. Aveces se nos olvida que Dios, por Su gracia, nos amó a nosotros primero antes de que supiéramos que lo malo y lo bueno existía. Éramos solamente amados y lo seguimos siendo hasta hoy día.
Podemos descansar en la gracia del amor de Dios, porque es Su gracia el darnos y no de nosotros ganarlo. Sólo porque hemos sido corregidos por Dios no nos quita su amor hacia nosotros. A lo contrario, porque Dios corrige a quien El ama. Prov. 3:12 Porque el Señor disciplina a los que ama, como corrige un padre a su hijo querido.
Somos afortunados en tener la palabra de Dios a nuestro alcance para poder absorber de su fuerza de vida y renovar nuestra mente a lo que es verdad de lo que dice Dios acerca de nosotros y de cuánto nos ama. Jer. 31:3 El SEÑOR se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto te soporté con misericordia.
Solo un toque de Su gracia y Su amor puede cambiar nuestra vida entera, más la dirección a donde somos dirigidos. El rey David codiciaba el toque de Dios sombre él. David sabia el momento cuando era tocado por Dios, había un cambio inmediato. Salmos 51:7 Purifícame con hisopo, y quedaré limpio; lávame, y quedaré más blanco que la nieve.
Si, Señor, con tu toque en mi alma, mente, cuerpo y corazón será un profundo e inmediato resultado. Seré limpio y sanado porque tu pensamiento hacia mí es gracia, amor y a favor. Ayúdanos Señor, a dejar de tocar esa herida que nos infecta, ayúdanos a entregártela para recibir restauración y sanción con el toque de tu gracia. Haznos completos con el amor que tienes para nosotros y que el gozo del Señor sea nuestra fortaleza. En el nombre de Jesus. ¡Amen!
Misterios Y Seres Místico
Proverbios 14:12 Hay caminos que al hombre le parecen rectos, pero que acaban por ser caminos de muerte. Seres místicos que han resucitado en el folclor y la superstición a lo largo de la historia son extraños y a veces cómicos. Centauros, vampiros, hombre lobo,...
0 Comments