Proverbios 29:22 El hombre iracundo provoca peleas; el hombre violento multiplica sus crímenes.
Mientras caminamos por el camino de nuestra vida en Cristo, lo más probable es que nos encontremos con un poco de furia en el camino. Si, queridos cristianos, no solo, tendremos los insensibles y violentos del mundo que estarán en nuestros rostros, sólo porque hemos escogido la justicia de Cristo como un nivel alto para nuestras vidas, pero otros cristianos vendrán y tratarán de sacarnos del camino y después nos culpan por lo que pasó. Nos señalarán con críticas indignantes porque los causamos a empujarnos fuera del camino, pero con gracia, tendremos que decir, “Perdóname.“ Mateo 5:44 Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen. Tanto como nos gustaría decir “por favor perdóname por causarte a empujarme fuera de mi camino por tu furia en que llevas caminando,” no lo decimos, porque somos lo cristianos maduros en nuestra fe en ese lugar.
Durante nuestro camino, nos van a mentir. Ya sea que la mentira sea a propósito o por medio de mal interpretaciones, siempre pasará. Ya sea que la mentira ocurra para descarrilarnos, controlarnos, destruirnos, las mentiras llegarán. 1Reyes 13:18 El anciano replicó: —También yo soy profeta, como tú. Y un ángel, obedeciendo la palabra del Señor, me dijo: “Llévalo a tu casa para que coma pan y beba agua”. Así lo engañó. Esto puede causar un poco de furia en nuestro camino cuando lo justificamos, pero llevemos todo hacia El Señor en oración. De todas maneras, necesitaremos poner la otra mejilla y dejar que El Señor juzgue la situación por medio Su conocimiento completo de amor. No es un camino fácil en el que estamos caminando.
Mientras aprendemos a caminar en el camino de la paz de Dios y de su amor, puede que lleguemos a ser víctimas de eventos no previstos. Puede que nos encontremos en medio de la rabia de otra persona que está derribando a cualquiera y a todo que esté a su alcance. Lucas 10:30 Jesús respondió: —Bajaba un hombre de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de unos ladrones. Le quitaron la ropa, lo golpearon y se fueron, dejándolo medio muerto. Hay cosas que pasan mientras caminamos por la vida, y a veces nos golpea una bomba voladora de acciones y reacciones de otras personas que están heridas por dentro. A este punto en nuestro camino como cristiano podemos llegar a amargarnos y empezar a navegar nuestra vida imprudentemente mientras empujamos a todos camino a la iglesia. De todas maneras, tenemos que ser conscientes que podemos llegar a ser ese hombre lleno de rabia en ese lugar y tenemos que cambiar nuestra actitud para que no continúe creciendo. Prov. 29:22 El hombre iracundo provoca peleas; el hombre violento multiplica sus crímenes.
No necesitamos sabiduría para comprender la diferencia entre una auto-justicia ofensa y enojo justo. Efe 4:26 «Si se enojan, no pequen». No permitan que el enojo les dure hasta la puesta del sol. Enojo justo no es odiar al pecador sino al pecado. Es por eso que El Señor nos pide que tomemos su yugo y caminemos con Él para que podamos aprender como ver la diferencia. Pecar y pecando traerá muerte, pero Jesús nos trae vida y el poder de sobresalir del pecado. Somos nacidos de nuevo hacia la justicia y ese es el camino que caminamos. Mateo 7:13 »Entren por la puerta estrecha. Porque es ancha la puerta y espacioso el camino que conduce a la destrucción, y muchos entran por ella.
Últimamente mientras camino en mi camino de la vida eterna, he tenido que lidiar con mi furia como cristiano. Basta con decir, el camino no ha sido pavimentado sin problemas y me he tropezado en algunos hoyos. He notado que he sentido el deseo de empujar a otros viajeros que están aparentando ayudarme a encontrar redención con su marca propia de ideas de lo que es redención y justicia en Cristo. He tenido que hacerme atrás y pensar antes de hablar. Qué concepto es ese y la habilidad que tenemos que tener para aprender. Prov. 17:28 Hasta un necio pasa por sabio si guarda silencio; se le considera prudente si cierra la boca. Claro, aun un tonto puede parecer inteligente si mantiene la boca cerrada. Pude llegar a ser un tonto queriendo sacar todo lo que en realidad pienso, pero después dije, “No hay un adulto en este lugar.” Entonces escogí ser ese adulto.
Todos pasamos por etapas de duda y tiempos difíciles, y hay gracia cuando se lo llevamos al Señor en oración. Mantener nuestros corazones limpios y directos ante Dios, es lo que el Señor espera de nosotros. Entonces, necesitamos unir nuestras vidas a nuestro Señor y aprender cómo jalar con Cristo para que no terminemos magullados e irritados por el yugo que estamos jalando a diferente dirección en la que El Señor nos lleva. Tenemos que recordar que estamos caminando directamente al lado del Señor, asegurándonos que estamos paso a paso en Él. Cristo nos guía y nosotros lo seguimos. Que pueda hacer el mundo para tropezarnos si somos uno con Cristo? Rom. 8:37 Sin embargo, en todo esto somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Gocemos nuestro camino en que estamos y que El Espíritu Santo sea nuestra guía en nuestro camino de redención. ¡Amén!
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