Prov 12:15 Al necio le parece bien lo que emprende, pero el sabio atiende al consejo.
En 1988 mi familia de niños pequeños vivíamos en un pueblo que se llama Margate, en Queesland Australia. Fuí a la sucursal local de mi banco para cambiar dinero efectivo australiano a canadiense como lo había hecho antes en este mismo local en otras ocasiones. La nueva cajera me miró como si yo era extraño diciéndome con una voz clara y contundente, “Canadá no tiene moneda propia ellos usan la moneda americana” me dice, “tienes que comprar dólares americanos” Al principio creí que estaba bromeando, pero me di cuenta que hablaba en serio. Con una voz más alta proclamaba que que yo estaba en un error pensando que Canadá tenía su propia moneda. Con paciencia le expliqué que la foto que la reina estaba en nuestros billetes, el billete de dos dólares y el de veinte tendrá la palabra CANADÁ escrito arriba del billete. También le expliqué que en el pasado había cambiado dinero en esta misma sucursal. Ella empezó a enojarse pero siempre cortes diciéndome que estaba en un gran error. Me di cuenta que el gerente de la sucursal pasaba y llame su atención, él se acerca y pregunta cuál era el problema, la cajera bruscamente intervino con una explicación condescendiente en voz alta diciendo, “Este hombre quiere comprar dinero canadiense en efectivo pero no hay tal cosa, ya le dije que tiene que comprar dólares americanos” El gerente la ve a ella con una mirada de pregunta y le sugiere que ayude a otra persona, el va y trae el dinero canadiense y se disculpó por el mal entendido. Yo no sè que pasó con esa conversación entre gerente y cajera después, pero mientras salía de la sucursal me di cuenta que ella estaba sincera en lo que hablaba pero sinceramente equivocada.
No hay nada malo en estar equivocado o sinceramente equivocado, así es como aveces aprendemos lo que es correcto. Nos equivocamos y después aprendemos la lección y llegamos a ser mejor por ello. De todas maneras, el insistir en estar en lo incorrecto y mantenernos así después de saber la verdad que ha sido revelada claramente es la acción de un tonto o un necio. Salmos 14:1-A Dice el necio en su corazón: «No hay Dios.» Solo que seas un abogado de una tabaquería, farmacia o agricultura, insistiendo en no estar equivocado es simplemente ser tonto. Isa. 5:20 ¡Ay de los que llaman a lo malo bueno y a lo bueno malo, que tienen las tinieblas por luz y la luz por tinieblas, que tienen lo amargo por dulce y lo dulce por amargo!
El apóstol Pablo era un fuerte Fariseo sinceramente equivocado. Entusiasta con las cosas de Dios. Filipenses 3:5 circunci
No hay nada malo en estar equivocado o sinceramente equivocado, así es como aveces aprendemos lo que es correcto. Nos equivocamos y después aprendemos la lección y llegamos a ser mejor por ello. De todas maneras, el insistir en estar en lo incorrecto y mantenernos así después de saber la verdad que ha sido revelada claramente es la acción de un tonto o un necio. Salmos 14:1-A Dice el necio en su corazón: «No hay Dios.» Solo que seas un abogado de una tabaquería, farmacia o agricultura, insistiendo en no estar equivocado es simplemente ser tonto. Isa. 5:20 ¡Ay de los que llaman a lo malo bueno y a lo bueno malo, que tienen las tinieblas por luz y la luz por tinieblas, que tienen lo amargo por dulce y lo dulce por amargo!
El apóstol Pablo era un fuerte Fariseo sinceramente equivocado. Entusiasta con las cosas de Dios. Filipenses 3:5 circunci
En que hemos estado sinceramente equivocados y seguimos totalmente discutiendo o peleando el derecho de ser? Que sabes que en tu corazón estás haciendo pero por el bien de estar en lo correcto mantienes tu postura y bravata? Ya es tiempo de renunciar ya deja que El Espíritu de verdad te oriente y dirija a ser sincero en lo correcto. Jesus es El Señor y aquí ès donde empezamos. Juan 14:6 —Yo soy el camino, la verdad y la vida —le contestó Jesús—. Nadie llega al Padre sino por mí. Cambiemos nuestro corazón equivocado hacia Cristo que lleguemos a ser justos en lugar de sólo ser correcto en algo. Usemos nuestra fe para crecer en las cosas de Dios para que lleguemos a ser un placer para Dios. Heb 11:16 En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan. Seamos sinceros en nuestro camino de fe para nuestros Señor y Salvador Jesucristo. Amen!
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