Proverbios 10:22 La bendición del Señor trae riquezas, y nada se gana con preocuparse.
Somos ricamente bendecidos que muchas veces no vemos las bendiciones que están enfrente de nosotros. Se nos ha dado tanto amor y ayuda de Dios, que nuestra capacidad de obtener todo es más allá de nuestra comprensión. 2 Pedro 1:3 Su divino poder, al darnos el conocimiento de aquel que nos llamó por su propia gloria y excelencia, nos ha concedido todas las cosas que necesitamos para vivir como Dios manda.
Desafortunadamente, no siempre contamos nuestras bendiciones, porque son innumerables. Sea como fuere, ¿Porque ya no contamos nuestras bendiciones que vemos en nuestras vidas? ¿Hemos llegado a ser complacidos con la generación de Dios, y llegado a ser ciegos de su generosidad? Espero que no, porque las bendiciones del Señor puede hacernos ricos en gratitud así como en provisiones para vivir una vida bendecida.
Nosotros aveces fracasamos en ver la grandeza del plan de Dios, porque estamos viendo lejos de las respuestas que están cerca. “La respuesta está en casa.” Esta es una de las expresiones de mi esposa cuando busca por una respuesta para uno de los problemas de la vida. Su fe le está diciendo que Dios ya ha solucionado el problema. De todas maneras, solo tenemos que creer en fe y ver cómo se manifiesta. Mi esposa ve este principio en acción en 2 Reyes 4:1-7.
Habia una viuda que tenia que pagar una deuda y los creditores llegaban a cobrar. Ella le pidio ayuda a Elíseo y è le dijo, “¿Què tienes en tu casa?” 2 Reyes 4:2 —¿Y qué puedo hacer por ti? —le preguntó Eliseo—. Dime, ¿qué tienes en casa? —Su servidora no tiene nada en casa —le respondió—, excepto un poco de aceite. En fe y un milagro de provisión ella obedece a Elíseo a prestar muchos frascos y llenarlos de de aceite. Ella no dejó de echar aceite hasta que el último frasco estuviera lleno. Ella pudo vender el aceite y pagar lo que debia, aún asi, le había sobrado para ella. ¡Imaginense! La reapuesta estaba en casa.
En otra escritura, Moisés necesita la yuda de Dios y lo único que èl tenia era su bastón de pastor. Éxodo 4:2 —¿Qué tienes en la mano? —preguntó el Señor. —Una vara —respondió Moisés. Dios usa lo que Moisés tiene a la mano para salvar a Israel. La respuesta estaba en su casa, por decirlo así. Moisés no tuvo que salir a una búsqueda para encontrar algo muy único o aún una arma que podría utilizar en contra de la armada Egipcia. Dios pudo liberar una nación con lo que encontró que tenía Moisés, que era su bastón. La bendición que necesitaba Moisés estaba en su mano. Con Dios, todo es posible. Mateo 19:26b Mas para Dios todo es posible. Agradecimiento a Dios por lo que sí tenemos es lo que Dios puede usar y ricamente bendecirnos.
Mientras tanto, un día el hombre quien compró su propiedad, pasaba por un pequeño arroyo en la misma propiedad, cuando de repente vio algo azul y rojo que brillaba desde el fondo de la corriente en este arroyo. Se agachó y recogió esta piedra. Había encontrado uno de los diamantes más grandes que jamás se había descubierto. El primer granjero vendió para poder salir y encontrar una mina de diamantes, pero esta propiedad termino siendo una de las más productivas minas de diamantes entre todo el continente Africano. El primer granjero ya era dueño, completamente dueño de toda esas hectáreas de minas de diamantes. Pero la vendió prácticamente por casi nada, para poder buscar lo que ya tenia en otros lugares.
Es una historia increíble de pérdida y ganancia. Hay tantas cosas en esta vida con lecciones y enseñanzas significativas. ¿Cuantas personas están caminando por la vida buscando bendiciones que están solo bajo sus pies? De hecho, están caminado bendiciones en abundancia peor sin poder verlas o apreciarlas, porque no son agradecidos a Dios por lo que han tenido en la vida. 1 Tesalonicenses 5:18 Den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús.
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