Proverbios 10:8 El de sabio corazón acata las órdenes, pero el necio y rezongón va camino al desastre.
Cualquier persona que escribe un blog o cualquier tipo de página de redes, que agrade la interacción u opiniones sobre un tema que se ha escrito, tienen que lidear con parlanchines. En algunos casos, grupos de personas empiezan a discutir con vehemencia en paginas de otros quienes solamente quieren respuesta simple a una pregunta. Con crueldad estos tontos parlanchines toman el control, publicando sus ininteligibles manifiestos, y no importa la cantidad de intervención sabía que se escriba de la pregunta original, no leen ni ponen atención, que llegan a olvidarse de que hablan. Prov. 10:8 El de sabio corazón acata las órdenes, pero el necio y rezongón va camino al desastre.
El apóstol Pablo nos instruye que no nos dejemos atrapar en las interminables discusiones sin sentido que están fácilmente disponibles al tocar una aplicación. 2Tim. 2:16 Pero fue reprendido por su maldad: su burra —una muda bestia de carga— habló con voz humana y refrenó la locura del profeta. 17a Estos individuos son fuentes sin agua. Me pongo a pensar cuantas personas darían sus opiniones, si supieran que van a ser juzgados por cada palabra inactiva que dicen. Pero entonces, pienso si les importa lo que Dios dice. Mateo 12:36 Pero yo les digo que en el día del juicio todos tendrán que dar cuenta de toda palabra ociosa que hayan pronunciado. 37 Porque por tus palabras se te absolverá, y por tus palabras se te condenará».
Leemos la historia de Coré quien juntó a unos parlanchines quienes asumieron que iban a tomar la posición de sacerdocio como Moisés. Coré empezó una rebeldía contra el liderazgo de Moisés. Núm. 16:3 Se reunieron para oponerse a Moisés y a Aarón, y les dijeron: —¡Ustedes han ido ya demasiado lejos! Si toda la comunidad es santa, lo mismo que sus miembros, y el Señor está en medio de ellos, ¿por qué se creen ustedes los dueños de la comunidad del Señor? Lo que es interesante en esta historia es, que esta gente habían llegado a la conclusión, que podían organizar un sistema de alabanza de Dios a sus propias ideas de sacerdocio. Así como lo dice el proverbio, “El sabio se alegra de ser instruido.” Coré y su grupo no les gustaba ser instruidos. Ellos querían poder con sus propios términos.
Dios instruyó a Moisés de darles a las personas una oportunidad de separarse de Korah y a lo rebeldes que había juntado. Así como mucha gente hoy día, media vez los parlanchines empiezan es difícil cambiar el rumbo y pensar bien las cosas con lógica y verdad. La gente se encuentra atrapada en narrativas equivocadas que de repente llegaron a ser populares, no importando si el hecho se ha comprobado ser verdad. Hay mucha desconfianza en cualquier tipo de autoridad hoy día, la teoría de conspiración puede correr desenfrenado sin importar cuán idiotas sean.
Después de que Moisés les dio a la gente la oportunidad de hacerse a un lado y que pensaran las cosas bien, Coré y su grupo fueron dejados al escrutinio y juicio de Dios. Núm. 16:31 Tan pronto como Moisés terminó de hablar, la tierra se abrió debajo de ellos; 32 se abrió y se los tragó, a ellos y a sus familias, junto con la gente y las posesiones de Coré. 33 Bajaron vivos al sepulcro, junto con todo lo que tenían, y la tierra se cerró sobre ellos. De este modo fueron eliminados de la comunidad.
Los parlanchines nunca pensaron en esto. El costo de su retórica, causó que todos los miembros de su familia llegaran a morir. Perdieron todo por una idea ideológica sin sentido. Como lo dice los Proverbios, “Pero el necio y rezongón va camino al desastre.” ¿En que estás tan aferrado que puedas perder a tu familia, hogar y trabajo, porque te has encerrado en una creencia errónea que al final, no importa. Cuando te convertiste en un parlanchín que te está llevando a perder tu sentido de dirección?
Empecemos a traer nuestras ideas y pensamientos a Dios y dejemos que Él las ordene con nosotros. Trabaja en los eventos de la vida con el Señor y las cosas se hacen bien. Antes de convertirnos en un activista de conspiración, preguntémosle a Dios si es esto lo que Él quiere que vivamos en nuestra corta vida. Dios sabe porqué nos ha creado, entonces, preguntémosle, cuál es el propósito de nuestra vida y que es lo importante para Él, para que podamos ser todo lo que es posible ser en el reino de Dios y vivir en paz mientras cumplimos nuestra llamada en la vida. Es una manera mejor salir de esta tierra que como un parlanchín tonto. ¡Amén!
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