Prov. 31:12 Ella le es fuente de bien, no de mal, todos los días de su vida.
Joel Osteen dijo: “¿Si no somos fiel en el desierto, entonces como podemos ser fieles en la tierra prometida?”
La palabra del hombre es su fianza, su código de bono por vivir. Ser fiel en todo aspecto de la vida es una buena meta que cumplir. El mundo parecerá un lugar difícil para vivir esta clase de nivel, pero con El Señor en tu corazón es posible. No siempre va a ser fácil, pero es posible. Lucas 16:10 »El que es honrado en lo poco, también lo será en lo mucho; y el que no es íntegro en lo poco, tampoco lo será en lo mucho. Todos conocemos a alguien quien ha sido estafado por una oferta asegurada a no fallar y esa persona resultó perdiendo hasta su camisa por decirlo así. ¿Qué salió mal? Muchas veces nuestra fe se ha puesto en una creencia falsa en la vida, calculando mal el caracter de la persona. Terminan poniendo toda su confianza en un humano en lugar de Dios. Aún un humano con las mejores intenciones puede equivocarse y es por eso que debemos mantener nuestro corazón y mente en Cristo. Jer. 17:5 Así dice el Señor: «¡Maldito el hombre que confía en el hombre! ¡Maldito el que se apoya en su propia fuerza y aparta su corazón del Señor! Es por eso que debemos edificar nuestra fe y mantenernos fieles a cualquier costo.
Leemos que el rey David asegurándose de su parte de el convenio que hizo, llegara a cabo años después de la muerte de Saúl y Jonatán. No le importaba a David que el otro partido había mantenido o no su parte del trato, él haría su parte. David pregunto si todavía habían descendientes de la familia de Saúl 2 Sam. 9:1 El rey David averiguó si había alguien de la familia de Saúl a quien pudiera beneficiar en memoria de Jonatán. David supo que Mefiboset, un hijo de Jonatán, todavía vivía pero vivía en pobreza. Él es cojo por un accidente de su niñez y le cuesta moverse. El Rey David dijo que le llevaran a Mefiboset y David le devolvería todo lo que le habían quitado a su familia y el Rey David así lo hizo, aún más, Mefiboset comería en la mesa del rey por el resto de su vida. 2 Sam. 9:7 —No temas, pues en memoria de tu padre Jonatán he decidido beneficiarte. Voy a devolverte todas las tierras que pertenecían a tu abuelo Saúl, y de ahora en adelante te sentarás a mi mesa.
Alguien podría decir que que el Rey David no tenía que guardar su parte del trato, porque el otro partido no guardo el de ellos. Cuando tú eres fiel en la fidelidad de Dios, tú mantienes tu trato tu parte del convenio que se hizo, porque el convenio no se ha hecho solo con la otra persona sino también con Dios. Cristo nos inspira a hacer lo que Dios ha puesto en nuestra personalidad, no importa lo que los otros hagan. 2 Timoteo 2:13 Si somos infieles, él sigue siendo fiel, ya que no puede negarse a sí mismo. La fidelidad en la fe no es circunstancial pero la realidad de vivir. Yo escojo ser fiel porque Dios es fiel conmigo. Yo recuerdo una persona que cometió adulterio y defendía su posición el porque no guardo su trato del convenio en matrimonio, porque su esposo había cometido adulterio primero. Esta persona decía, “porque tengo que mantener el trato del convenio de matrimonio cuadro él me ha causado tanto mal” esta persona pensaba que el pecado de adulterio que estaban cometiendo no era gran cosa porque solo estaban correspondiendo lo que le hacía uno al otro. Lo único que podía pensar era que inmadurez venía en todas tallas y paquetes. Esta persona se le había olvidado que el convenio matrimonial no sólo se había hecho con su pareja sino también con Dios. Prov. 20:22 Nunca digas: «¡Me vengaré de ese daño!» Confía en el Señor, y él actuará por ti.
El ser fiel en la fidelidad no es solo una buena idea porque mientras estamos en esta tierra, fidelidad en la fe, es vida en sí misma. En el día del juicio no vamos a estar ante Dios con alguien, vamos a estar solos con Dios y las palabras que quieres escuchar es “Bien hecho fiel siervo.” No importa qué tan difícil eventos en la vida pasemos, ser fieles a todo costo es estar en un lugar de paz. A Dios le agrada cuando continuamos levantándonos y aplicamos fe en cualquier situación. Heb. 11:6 En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan. Cuando Dios nos busque, ¿nos encontrará fieles en la fidelidad de las cosas hacia El? Espero que si, Lucas 18:8-B No obstante, cuando venga el Hijo del hombre, ¿encontrará fe en la tierra?»
Mientras Todavía Podamos Respirar
Génesis 2:7 Y Dios el Señor formó al ser humano del polvo del suelo; entonces sopló en su nariz aliento de vida y el hombre se convirtió en un ser viviente. Desde el primer soplo de aliento que fue transferido a las nasales de Adan, fue la propia fuerza infinita...
0 Comments