Proverbios 28:21 No es correcto mostrarse parcial con nadie. Hay quienes pecan hasta por un mendrugo de pan.
La palabra de Dios tiene muchas ironías y misterios para contemplar. El mundo también tiene sus propias ironías cuando lo observemos. Una de las preguntas que con frecuencia le pregunto a Dios es acerca de la ironía que se encuentra en el proverbio de arriba. Prov. 28:21b Hay quienes pecan hasta por un mendrugo de pan. Mi parte en la conversación con Dios normalmente es así, “Ya que el hombre peca, transgresa o roba un pedazo de pan, entonces ¿porqué lo creaste con esa necesidad del pan para su existencia terrenal? Parece ser como una trampa sin salida.” Claro, muchas respuestas pueden ser para un debate con el porqué, pero ahí está, una ironía para contemplar.
Nuestro Padre Celestial también nos invita a que vengamos y razonemos con Él no importa en qué circunstancias estemos. Isa. 1:18 »Vengan, pongamos las cosas en claro —dice el Señor—. ¿Son sus pecados como escarlata? ¡Quedarán blancos como la nieve! ¿Son rojos como la púrpura? ¡Quedarán como la lana! Amistad con Dios nos da una manera o inversión con interés por ser parte eterna del plan de Dios. Hemos sido creados en su imagen para ejercer nuestra habilidad creativa en resolver problemas y contemplar los complejos, misterios e ironías de la vida.
Hace unas semanas, fui parte de unas celebraciones familiares, cumpleaños y reuniones. Una de las ironías que observé y me pusieron a pensar fueron, “¿Porqué hay alcoholicos con mucha sed? “¿Porque hay glotones con mucha hambre? ¿Porqué hay gente tóxica que trata de bajar a todos a su nivel patético? No estoy apuntando a ninguno en particular, porque no soy yo quien los juzga. Lo que pienso solo es una observación de los que tienen comportamiento destructivo. Ecle. 1:14 Y he observado todo cuanto se hace en esta vida, y todo ello es absurdo, ¡es correr tras el viento! Además, si le preguntas a mi familia acerca de mi, ellos apuntaran cosas en mi vida en que los pone a que pensar. He llegado a realizar, que no puedo cambiar a las personas de mi alrededor, pero puedo cambiar las personas de mi alrededor.
Para mí, una de las ironías de la vida es que Dios nos ha dado todo lo necesitamos para ser bendecidos del Señor. Aún así, ese bendito regalo se le ha tirado de regreso a Su cara con malicia. Las personas quieren ser libres, pero no quieren la libertad. Éstas mismas personas que rechazan la oferta eterna de Dios viven una vida de destrucción, después se quejan que su vida es injusta. Prov. 23:29 ¿De quién son los lamentos? ¿De quién los pesares? ¿De quién son los pleitos? ¿De quién las quejas? ¿De quién son las heridas gratuitas? ¿De quién los ojos morados? Es como un prisionero quejándose de su encarcelamiento por asesino y que su libertar es muy limitada.
Es cierto que con Cristo muchos de la problemas pueden llegar a victoria, sobresalir y ser derrotadas. Pero no vivimos en un mundo en donde todos aceptan la autoridad de Dios en su vida. Vivimos en un mundo caído, donde asesinos, corrupción y dictadores duros son considerados como opciones razonables, solo es una de las maneras de hacer negocios por decirlo así. Las tarjetas del mundo de negocios dice así, -Mutilación Criminal R US. Salmos 12:1 Sálvanos, Señor, que ya no hay gente fiel; ya no queda gente sincera en este mundo. 2 No hacen sino mentirse unos a otros; sus labios lisonjeros hablan con doblez.
He estado contemplando muchas cosas estas últimas semanas, y no importa cuantas opiniones ó teorías que las gente tine para las aflicciones del mundo, siempre viene a ésta elección. Ecle. 12:13 El fin de este asunto es que ya se ha escuchado todo. Teme, pues, a Dios y cumple sus mandamientos, porque esto es todo para el hombre. 14 Pues Dios juzgará toda obra, buena o mala, aun la realizada en secreto.
Entonces, regreso a mi pregunta para Dios en el Prov. 28:21b Hay quienes pecan hasta por un mendrugo de pan. Yo creo que la respuesta para mí es, que también necesito obedecer a Dios quién es el pan de la vida y quien me ha dado Su vida. Pan, en sí solo, puede darnos lo que necesitamos para nuestra existencia diaria, pero el regalo de Dios por medio de Cristo nos da una vida eterna. Ésta vida nos da el poder de escoger la voluntad de Dios y escogerlo a Él como nuestro Señor y proveedor. Entonces, intensificando la razón del vivir más allá de la existencia de este mundo, puedo vivir con ello. Bendiciones a todos nosotros.
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