Proverbios 29:25 Temer a los hombres resulta una trampa, pero el que confía en el Señor sale bien librado.
Jesús no necesita practicar el distanciamiento-social. Él es inmune a toda enfermedad y Él, vive en nuestro corazón. Heb. 13:5b Porque Dios ha dicho: «Nunca te dejaré; jamás te abandonaré»
¿Puedes imaginarte, Dios poniendo un letrero así en el cielo? “Cerrado hasta nuevo aviso por la incertidumbre de la vida eterna, vamos a tener que poner la salvación en pausa.” Gracias Señor que Él está en control de todo el universo y lo que Dios ha prometido, será hecho. Podemos contar con nuestro Señor que sea una bendición porque una bendición es lo que Él es. Los mismos cielos nos señala las grandezas de Dios. Salmos 19:1 Los cielos cuentan la gloria de Dios, el firmamento proclama la obra de sus manos.
Que decepción son estos letreros (cerrado hasta nuevo aviso) han llegado en este tiempo de infección. Nos encontramos preguntándonos, ¿Cuando lo van abrir? Y la respuesta comun es “No sabemos, todo lo que sabemos es esto, cerrado hasta nuevo aviso.” Estoy tan agradecido que Dios no lleva su Reino de esta manera. Las limitaciones del hombre han llegado a ser aparentemente claro a nosotros, durante este tiempo, a una ansiedad histérica. Poner nuestra confianza en la del hombre de guiar a este mundo, es un juego de incertidumbre. Jer. 17:5 Así dice el Señor: «¡Maldito el hombre que confía en el hombre! ¡Maldito el que se apoya en su propia fuerza y aparta su corazón del Señor!
Somos tan bendecidos que nada puede parar las bendiciones de Dios en encontrarnos y satisfacernos a nuestro propósito y llamado en la vida. No guerra, no hambre o enfermedad viral puede parar las bendiciones de Dios. Salmos 91:10 Ningún mal habrá de sobrevenirte, ninguna calamidad llegará a tu hogar. La palabra de Dios declara que podemos clamar Su nombre y Él nos escucha y nos guía en este camino de circunstancias desconocidas. Jer. 33:3 “Clama a mí y te responderé, y te daré a conocer cosas grandes y ocultas que tú no sabes”.
En Dios no hay nada de esto “cerrado hasta nuevo aviso” al contrario, nuestro Señor sabe lo que está haciendo y sabe cómo liberar a Su gente del ataque del enemigo y de la incertidumbre pronosticada del sistema mundial. Lo que tenemos que hacer, es poner nuestra confianza en Él y no en el temor de la humanidad. Prov. 29:25 Temer a los hombres resulta una trampa, pero el que confía en el Señor sale bien librado. Dios es muy capaz de sacarnos de cualquier desastre que este activo ahora y en el futuro.
Solo porque el sistema del mundo ha publicado estos letreros de cierre por los efectos desconocidos de enfermedades y el temor que causa, no quiere decir que lleguemos a ser cobardes de corazón por los eventos mundiales. Si alguna vez hubo tiempo de ponernos la armadura de Dios completa para extinguir los dardos de temor que el enemigo nos ha estado tirando sumergidos con virus, es ahora. Efe. 6:16 Además de todo esto, tomen el escudo de la fe, con el cual pueden apagar todas las flechas encendidas del maligno. Ahora que tienes puesta la armadura de Dios, estás vestido de oración. Entonces ora! Efe. 6:18 Oren en el Espíritu en todo momento, con peticiones y ruegos. Manténganse alerta y perseveren en oración por todos los santos.
Quienes están en Cristo en fe, tienen el oído de Dios siempre. Sabemos que Él nos escucha, entonces sabemos que nuestro pedido ha sido escuchado por nuestro Señor Todo Poderoso. 1 Juan 5:14 Esta es la confianza que tenemos al acercarnos a Dios: que, si pedimos conforme a su voluntad, él nos oye. 15 Y, si sabemos que Dios oye todas nuestras oraciones, podemos estar seguros de que ya tenemos lo que le hemos pedido. Necesitamos saber que estamos orando la voluntad de Dios cuando estamos intercediendo por otras personas de este mundo para que sanen. Son las misericordias de Dios que guía a las personas a arrepentimiento.
Hasta nuevo aviso, estaré orando y pidiéndole a Dios por su poderoso rescate durante esta tierra. Hasta nuevo aviso, seguiré destruyendo las obras del enemigo orando completamente vestido en la armadura que Dios nos ha dado. La verdad es que Jesús ya venció al mundo y a todos sus amenazantes factores en ello. Entonces alinea tu fe con la del Señor y ora contra la destrucción de este ataque viral y todo aquello que obstaculiza la vida. El Él nombre de Jesús.
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