Proverbios 14:27 El Señor aborrece los planes de los malvados, pero se complace en las palabras puras. 
      
1 Corintios 15:26 El último enemigo que será destruido es la muerte.       
     Que tan maravilloso será cuando resucitemos de entre los muertos y nuestro último enemigo, la muerte, termine destruida y se rinda sin ningún poder para siempre. La vida resucitada que Cristo ha creado entre nosotros por medio de Su sangre y amor, es una fuerza eterna que tenemos que considerar. Nada nos puede separar del amor de Dios o los planes que Él tiene para cada uno de nosotros, quienes amamos al Señor y hemos aceptado a Jesús como nuestro salvador. Rom. 8:38 Pues estoy convencido de que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los demonios, ni lo presente ni lo por venir, ni los poderes, 39 ni lo alto ni lo profundo, ni cosa alguna en toda la creación podrá apartarnos del amor que Dios nos ha manifestado en Cristo Jesús nuestro Señor.  
      La muerte es el último enemigo que tiene efecto temporalmente en nosotros mientras vivimos ahora. De todas maneras, la vida eterna a que vamos a entrar es más allá del entendimiento y explicación. Vemos la muerte como algo desagradable, en sufrimiento que tenemos que enfrentar. Pero la palabra de Dios dice, el sufrimiento no es en comparación a la vida glorificada que viviremos durante la eternidad. Rom. 8:18 De hecho, considero que en nada se comparan los sufrimientos actuales con la gloria que habrá de revelarse en nosotros.          
      ¿Verdad que es reconfortante saber lo que Dios  ha vencido?  Cierto, vivimos con la amenaza de la muerte física sobre nuestra vida, de todas maneras, Dios nos ha quitado el miedo y el aguijón de la muerte para aquellos de nosotros que caminamos en Cristo, salvados en la obra final de la cruz por medio de la sangre de Jesús. 1 Cor. 15:54  Cuando lo corruptible se revista de lo incorruptible, y lo mortal, de inmortalidad, entonces se cumplirá lo que está escrito: «La muerte ha sido devorada por la victoria». 55 «¿Dónde está, oh muerte, tu victoria? ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón?»  
      ¡Que Dios más increíble que tenemos! quién es capaz y poderoso de destruir los efectos de la muerte y de la muerte misma. Por medio de nuestro Señor resucitado entre nosotros, en realidad regresamos de la muerte con una gloria completa, teniendo un cuerpo eterno completo y vida. Esto no es una adaptación de una película de Frankenstain o zombies regresando de un lugar infernal solo para ser destruidos otra vez. ¡No, no hermanos! Esta es una resurrección verdadera de enfermedades, y corrupciones que alguna vez se hallan prendido en el cuerpo físico del hombre siendo destruida por los siglos de los siglos. 
      Apocalipsis 20:14a La muerte y el infierno fueron arrojados al lago de fuego. Esto es una buena noticia para los que le tienen miedo a la constante presencia de la muerte amenazadora. Saber que la muerte tiene un alcance limitado en nuestras vidas, que solo llega a ser susurros es algo de estar agradecidos con Dios. La muerte ha terminado, porque ahora tenemos vida eterna  por medio de Cristo.  
      Entremos ahora en la vida que Dios tiene para nosotros por medio de Cristo, ejerzamos nuestra vida a lo máximo, porque tenemos vida personificada viviendo entre nosotros. Podemos traer vida a este mundo perdido y moribundo. Jesús es vida, el camino y la verdad en todo, Juan 10:10b Yo he venido para que tengan vida, y la tengan en abundancia. Gracias Señor por tu vida y por liberarnos del último enemigo. ¡Amén!